Internet es un medio diferente en el que hay que redactar de manera diferente.
Cuando escribimos para Internet, el titular tiene que ser atractivo, claro, condensado y sin artículos, a ser posible. Además, debe corresponderse con lo que vamos a contar. Muchas webs escriben para posicionarse mejor en los buscadores y no para reflejar el contenido real; otras lo hacen solo para captar nuestra atención y luego nos dan gato por liebre.
En todos los medios, pero en Internet más, se agradece que, después del titular y antes del cuerpo del texto, haya una entradilla para decir de qué va. De este modo, el lector sabrá si le merece la pena abordar el tema o no. Todos agradecemos que no nos hagan perder el tiempo.
Mejor, breve
La característica básica de un escrito atractivo en Internet es que sea breve. Esto no quiere decir que no podamos escribir longitudes largas o incluso larguísimas, sino que debemos resumir nuestros contenidos para que el lector, de un solo vistazo, sepa si le interesa seguir leyendo y no cuando lleve diez líneas. Así no caeremos mal de entrada.
Podemos extendernos, pero mejor a través de hipertextos, vínculos o enlaces que hagan que el quiera saber más acceda a más contenidos, pero el que tenga suficiente no se abrume ante todo lo que le queda por leer.
Es importante que los párrafos sean cortos y que cada uno exprese una sola idea.
La información de mayor interés debe darse al principio, esto es, en Internet hay que escribir en forma de pirámide invertida para que así la gente pueda llevarse algo puesto antes de dormirse.
Y lo dejamos aquí para predicar con el ejemplo. Otro día hablaremos del estilo en Internet.